Especialidades y tipos de terapias

Consiste en analizar y tratar los conflictos que surgen en las relaciones de pareja, tratando de brindarles soluciones con las que puedan mejorar o superar crisis en su relación.

Esta especialidad se centra en los aspectos psicológicos que intervienen en la respuesta sexual de las personas, analizando y aportando herramientas o soluciones para determinadas problemáticas que puedan surgir.

Engloba diferentes trastornos que pueden padecer a veces las personas, como respuesta a diferentes eventos psicobiográficos, y que les pueden causar miedo, ansiedad, inseguridades, excesiva preocupación, hiperreflexividad, evitación, e interferencia en su vida diaria. En consulta, analizamos cada caso en particular, para poder brindar herramientas a la persona con las que mejorar su situación actual.

Determinadas vivencias, situaciones, así como diversos factores, pueden influir en el estado anímico de las personas, afectándoles negativamente, así que, trataremos de realizar un modelo explicativo o análisis clínico funcional, donde la persona obtenga conocimientos sobre su situación, así como herramientas para poder mejorar su estado anímico.

Muchas veces el ritmo de vida que llevamos los seres humanos, así como las circunstancias personales de cada uno, pueden llevar al organismo a desarrollar sintomatología de estrés como respuesta, trataremos de analizar qué puede estar influyendo y cómo poder tener un mejor manejo de dicho estrés.

Es un trastorno del estado de ánimo caracterizado por sentimientos de tristeza, apatía, anhedonia, desesperanza… que puede producir alteraciones en el comportamiento, nivel de actividad, y pensamientos; causando importante interferencia en las distintas áreas de la vida de la persona. Con ayuda psicológica, la persona con depresión puede identificar la raíz, así como, obtener herramientas para mejorar su estado anímico y su calidad de vida.

Las fobias son un trastorno de ansiedad, caracterizadas por el temor intenso, desmedido, irracional, o desproporcionado a diferentes situaciones, objetos, seres vivos, lugares… que llevan a la persona a evitar enfrentarse o haciéndolo con intenso malestar, y, en consecuencia, interfiriendo en las distintas áreas de su vida y por ende la calidad de la misma.  Con ayuda profesional, trataremos de que la persona pueda ser capaz de ir exponiéndose gradualmente a su fobia y que vaya mitigando el malestar que le produce, hasta su extinción.

El trastorno obsesivo compulsivo, es un trastorno de ansiedad, que se caracteriza por un patrón de pensamientos y miedos no deseados o, intrusivos, que provocan comportamientos repetitivos, hiperreflexividad, rituales… con el fin de tratar de aliviar el malestar que provocan dichas obsesiones. Estas obsesiones y compulsiones generan gran interferencia en el día a día de la persona, así como un importante nivel de sufrimiento. Con la ayuda del psicólogo, la persona obtendrá conocimientos y recursos con los que mejorar su situación personal (obsesiones y compulsiones).

La autoestima es el conjunto de percepciones, pensamientos, sentimientos y comportamientos dirigidos hacia uno mismo, englobando, personalidad, rasgos físicos y carácter. En definitiva, es la forma en la que las personas nos evaluamos y valoramos a nosotros mismos. En consulta, analizamos y tratamos de aportar herramientas y recursos a la persona, con las que pueda ir mejorando la forma en la que se evalúa así mismo y, en consecuencia, mejorando también sus problemas de inseguridad.

El duelo es el proceso de adaptación emocional que surge ante cualquier pérdida significativa para la persona (seres queridos, rupturas en relaciones interpersonales, puestos de trabajo…). Cada persona vive su propio duelo, y con la ayuda profesional, se analizará la situación en particular y se le darán herramientas para ayudar a sobrellevar el proceso.

Muchas veces las relaciones interpersonales (familia, pareja, amistad…) pueden ser motivo de sufrimiento para una persona, a veces por la dinámica establecida, otras por características de la personalidad de ambos o de una de las partes, tipos de apego, estilos educativos, experiencias personales etc. En consulta, se ayuda a la persona a analizar y adquirir mayor grado de consciencia sobre lo que le acontece y estrategias con las que solucionar, mejorar o cambiar su situación.

La dependencia emocional se caracteriza por una dependencia psicológica que lleva a la persona a tener creencias, sentimientos y comportamientos adictivos en la relación, por el miedo intenso a la pérdida, y/o necesidad desmedida de afecto, generando muchas veces, una asimetría de roles entre los miembros de la relación, así como una dinámica que genera aún más inestabilidad emocional y psicológica. El psicólogo tratará de ayudar a la persona con herramientas con las que pueda ir aprendiendo a autoregularse emocionalmente.

Los trastornos de la conducta alimentaria se caracterizan por un patrón recurrente de conductas no saludables en relación a la ingesta de alimentos, pensamientos y creencias distorsionados sobre el propio cuerpo y la comida, generando un importante nivel de angustia y sufrimiento para la persona que los padece, así como interferencias en su vida cotidiana. El papel del psicólogo será fundamental para intervenir sobre esas creencias distorsionadas, estado anímico, mejorar la relación con los alimentos, e intervenir sobre las alteraciones conductuales, características de estos casos.

¿Sabías que el intestino está considerado el segundo cerebro?, ¿y si te dijera que nuestro cerebro e intestino están en constante comunicación, influyéndose mutuamente, con todo lo que eso puede conllevar, favorable y desfavorablemente? Es lo que se conoce como el eje intestino-cerebro. Desde este enfoque, ayudamos también a la persona a mejorar su calidad de vida, tanto con herramientas para la prevención como para la intervención.

Este término se usa para hacer referencia a aquellas personas que tienen su sistema nervioso más desarrollado y que permite percibir mayor cantidad de información proveniente de estímulos tanto externos como internos, percibiendo hasta los detalles más sutiles. Este nivel de análisis, así como, de procesamiento de la información, donde se siente todo a un mayor nivel de intensidad, en consecuencia, puede en ocasiones, llevar a la saturación, así como, a la ansiedad, estrés y depresión. Con la ayuda psicológica la persona puede obtener información y herramientas con las que poder mejorar su regulación emocional.

La psicología centrada en los adolescentes, busca acompañar y enseñar herramientas, así como ayudar en la resolución de conflictos característicos, durante este período de desarrollo biológico, psicológico, sexual y social de la persona.

Los ataques de pánico son la expresión de ansiedad en su máximo nivel, es una sensación de miedo intenso que provoca reacciones físicas cuando realmente no existe un peligro o amenaza real para ello. La persona puede sentir que pierde el control de la situación, o que sufre de un ataque cardíaco, o incluso tener la sensación de que va a morir. Contar con técnicas de relajación y herramientas con las que mejorar esas creencias distorsionadas, es clave para prevenir y evitar en la medida de lo posible su aparición, o poder hacer frente de una mejor forma, si llega a suceder. Con terapia psicológica la persona puede acceder a dichos recursos.

Los celos son una emoción, que en sí mismos, no son ni buenos ni malos, aparecen para indicar miedo ante la posible amenaza de pérdida de algo/alguien significativo para la persona, lo que realmente puede ser desfavorable para la persona es su gestión, lo que hace en consecuencia al sentirlos, y, por lo tanto, las interferencias que pueden acarrearle en las distintas esferas de su vida. Contar con ayuda profesional, puede ayudar a mejorar la gestión emocional y devolver así, equilibrio psicológico y emocional a la persona.

A veces, las personas podemos tener dificultades a la hora de comunicarnos con los demás, ocasionando interferencias importantes en las distintas áreas de la vida de una persona, con ayuda profesional, aparte de identificar un posible origen, tratamos de enseñarle a ser asertiva, de tal forma que, exprese de manera clara y honesta sus sentimientos, derechos, opiniones, sugerencias y demás, sin recurrir a la agresividad ni a la pasividad.

Es la tendencia a posponer o postergar en el tiempo aquellas responsabilidades, situaciones, necesidades y actividades, que deben atenderse, sustituyéndolas por otras más irrelevantes o agradables, llegando incluso en ocasiones a la evitación total. Esto puede deberse a diversos factores, con terapia psicológica tratamos de ver el origen según el caso, de esta tendencia, y, en consecuencia, tratar de buscar soluciones alternativas.

La ira o enfado, es una emoción que se manifiesta cuando la persona considera que existe o puede existir un resultado no favorable para sus intereses y que se expresa mediante el resentimiento, la irritabilidad… Cuando la persona no es capaz de regular correctamente dicha emoción, puede tener consecuencias negativas para sí mismo o personas de su alrededor. En consulta, se da la oportunidad de adquirir consciencia de cuándo se produce o qué provoca esa emoción y, en consecuencia, las herramientas necesarias para una mejor regulación emocional.